Si eres un desarrollador de software, es normal tener miedos al cambio, a salir de tu zona de confort y a encontrar excusas para no explorar nuevas oportunidades.
Si eres un desarrollador de software, es normal tener miedos al cambio, a salir de tu zona de confort y a encontrar excusas para no explorar nuevas oportunidades.
Pero, déjame decirte algo importante: en ese lugar incómodo fuera de tu zona de confort, es donde realmente creces.
La pregunta no es si hay un trabajo de desarrollador de software mejor para ti, sino si estás dispuesto a superar esos miedos, dar el paso y descubrir tu potencial.